
Cómo vivir una boda de ensueño frente al mar en la Costa Brava
Casarse frente al Mediterráneo es cumplir un sueño que combina belleza, emoción y elegancia. El sonido de las olas, la luz dorada del atardecer y la brisa marina se convierten en testigos silenciosos de un día inolvidable. En la Costa Brava, donde la naturaleza y el estilo se encuentran, las bodas adquieren una magia especial.
En este escenario idílico, Santa Romana se erige como uno de los enclaves más exclusivos para quienes desean una boda de lujo junto al mar. Situada en Caldes d’Estrac, a solo 30 minutos de Barcelona, esta finca histórica rodeada de jardines, terrazas y vistas panorámicas al Mediterráneo ofrece todo lo necesario para una celebración perfecta.
Aquí, el lujo se vive desde la sencillez y la autenticidad. Cada boda refleja la esencia de sus protagonistas, en un entorno donde cada detalle está pensado para emocionar.
El encanto de una boda junto al Mediterráneo
La Costa Brava es sinónimo de romanticismo y libertad. Con sus playas escondidas, su clima privilegiado y su luz inconfundible, este tramo de litoral catalán es un escenario natural para bodas con alma mediterránea.
En Santa Romana, ese espíritu se respira en cada rincón. Los jardines, la piscina y la arquitectura novecentista se combinan para crear una atmósfera única, donde el mar parece formar parte del propio evento. Las ceremonias pueden celebrarse al aire libre, con el sonido de las olas de fondo y la luz del sol bañando el paisaje.
El entorno invita a vivir la experiencia desde la calma. Nada es artificial ni impostado; todo fluye con naturalidad, desde la decoración floral hasta el ritmo de la música, para crear una sensación de armonía perfecta.
Casarse aquí es mucho más que organizar un evento: es vivir una historia.
Espacios ideales para celebrar tu boda frente al mar
Santa Romana ofrece una selección de espacios versátiles que se adaptan a diferentes estilos de boda, sin perder nunca su elegancia característica.
Los jardines principales, con su exuberante vegetación y vistas al horizonte, son el lugar preferido para ceremonias civiles o simbólicas. Las terrazas, amplias y bañadas por la luz natural, son perfectas para el cóctel o la cena al aire libre, mientras que la piscina ofrece un entorno sofisticado para un brindis al atardecer.
En el interior, la casa novecentista conserva su encanto histórico, con salones amplios y ventanales que se abren al mar. Es el escenario ideal para celebraciones más íntimas o para prolongar la fiesta hasta altas horas de la noche.
Cada espacio tiene una personalidad distinta, pero todos comparten un mismo lenguaje: el de la elegancia mediterránea. Aquí, el mar no es solo un paisaje, sino el hilo conductor de la celebración.
Organización integral y servicios exclusivos
Detrás de cada boda perfecta hay un equipo que convierte los deseos en realidad. En Santa Romana, la planificación es sinónimo de tranquilidad: cada detalle se coordina con precisión para que los novios puedan disfrutar plenamente del proceso y del gran día.
El equipo de la finca acompaña a las parejas desde el primer contacto, ofreciendo asesoramiento personalizado en todos los aspectos: la elección del espacio, la decoración, la iluminación, el catering y la música. Gracias a su experiencia, cada boda se adapta al estilo y personalidad de los protagonistas, manteniendo siempre un aire de sofisticación y coherencia estética.
Santa Romana colabora con los mejores profesionales del sector: floristas, decoradores, fotógrafos y chefs especializados en alta gastronomía mediterránea. Juntos crean experiencias que estimulan los sentidos y reflejan la elegancia natural del entorno.
Además, la finca dispone de suites de lujo donde los novios y sus invitados pueden alojarse. Estos espacios, diseñados para el descanso y la intimidad, combinan la serenidad del Mediterráneo con un confort contemporáneo. Despertar frente al mar después del día más importante se convierte así en el primer recuerdo del resto de la historia.
Detalles que marcan la diferencia
Las bodas más memorables no se definen por su tamaño, sino por los detalles que las hacen únicas. En Santa Romana, cada elemento contribuye a crear una atmósfera especial.
Desde los arreglos florales que reflejan la frescura del entorno hasta la iluminación cálida que acompaña la caída del sol, todo está pensado para generar emoción. Los menús, inspirados en la cocina mediterránea, combinan productos locales con técnicas de alta gastronomía, ofreciendo una experiencia culinaria que sorprende tanto por su sabor como por su presentación.
La música y el ritmo del evento se adaptan a cada momento: una ceremonia al aire libre con melodías suaves, un cóctel relajado con sonidos de guitarra, o una cena que termina en baile bajo las estrellas. Todo fluye con naturalidad, sin artificios.
Santa Romana convierte la organización de una boda en un proceso creativo y placentero. Cada decisión se toma con mimo, y el resultado es una celebración armoniosa, elegante y profundamente personal.
Inspiración para una boda perfecta
Imagina una ceremonia en un jardín frente al mar, pétalos sobre el césped y el horizonte como testigo. Un cóctel entre fuentes y palmeras, seguido de una cena bajo un cielo de luces suspendidas. Y, finalmente, un brindis en la piscina mientras la noche envuelve el lugar con su calma mediterránea.
Esa es la esencia de Santa Romana: una boda que no solo se celebra, sino que se siente.
Comienza a planificar tu boda de ensueño
En Santa Romana, cada boda es una historia que merece contarse con arte y emoción. Desde la primera visita, los novios descubren que aquí los sueños se materializan en forma de luz, mar y elegancia.
Descubre cómo Santa Romana convierte tu boda frente al mar en una experiencia inolvidable.
Haz de tu historia de amor una obra mediterránea donde cada detalle refleje lo mejor de vosotros.
Contacta con el equipo de Santa Romana y empieza a diseñar el día con el que siempre habías soñado.